Ewok

No recuerdo ni mi nombre ni mi edad, solo que vivía en una casa dónde los dueños fumaban una cosa súper hedionda que me daba vómitos. Ellos no me querían: me amarraban y no me daban de comer, me pegaban patadas, dormía en la lluvia. Me enfermé, tenía tos y botaba sangre por mi pene y me dolía mucho  🙁 .Llegó una niña que trataba de ayudarme, pero la Doctora me diagnosticó cáncer y dijo que en las condiciones en que vivía era mejor dormirme, no sabía lo que eso era, pero me gusto el término y pensé que sería bueno solo dormir.

Mi amiga lloraba y me sacó unas fotos que subío a una cajita con luz, mientras lloraba:  yo no sabía porque tanta pena si la Doctora dijo que yo descansaría.

Luego mi amiga dejó de llorar y me abrazó fuerte y se puso feliz, me metió en una cajita con reja y salimos a pasear. En el camino me contó que la llamó una nueva tía de FRC, quién que me apadrinaría y  me  ayudaría a mejorar, así que me llevó a la Clinica Veterinaria Vet’s.

Me examinaron y quede ahí en una jaula grande, blandita y calentita. La comidita era rica y cada cierto rato venían a verme. ¡Me acariciaban! Una tía súper tierna y linda me puso nombre Ewok, me gusto mucho 🙂 , todos me querían y cuidaban, solo una vez a la semana me pinchaban mi brazo y me ponían un medicamento, yo me portaba bien aunque no me gustaba eso.

Un día llegó una tía de Fundación Rescate Canino, con una Señora que dijo que me adoptaría. Las tías lloraban, porque dicen que es difícil que adopten un viejito como yo. Estoy muy feliz, me cuidan y me alimentan rico, tengo una casita grande y un patio lindo dónde me acuesto al sol y veo pasar el tiempo tranquilo, feliz y muy bien cuidado.

Mi mamá nueva tiene amigas que me van a ver y me quieren mucho, me llaman Huguito, en realidad me da lo mismo como me digan porque cuando me llaman corro feliz a su encuentro.